Por: Abel Carbajal, cmf.
Semají, Izabal, Guatemala
19.09.23
-Estoy aquí con mucho dolor de la experiencia vivida en la selva (Colombia- Panamá). Allí hay muerte, es como una película de terror. Hay robos, violencia y si no tienes como pagar, te matan. Hay que pagar si quieres salir con vida.
- ¿Qué es lo que tienen que pagar?
R: Se paga una travesía que incluye lancha; se paga por cada ruta ciento ochenta dólares. Hay guías que te obligan a pagar para protegerte de los asaltantes que salen armados y piden doscientos dólares por persona y si no lo das te disparan en los pies para obligarte.
Este pequeño diálogo forma parte de las declaraciones obtenidas de una mujer migrante de origen ecuatoriano. Ella va en tránsito migratorio desde hace más de dos meses junto a su familia. La entrevista completa dura once minutos en los que resume, entre lágrimas, los horrores vividos en su travesía hasta llegar a nuestro albergue en Semají, Izabal, Guatemala. La atención brindada a esta familia consiste en hospedaje, alimentación, kits de aseo personal, internet, ropa, calzado, entre otros. Esta misma asistencia cálida y fraterna es la que reciben todos los migrantes que tocan nuestras puertas. Llegan de muchos lugares, aunque la mayoría siguen siendo hondureños, ha aumentado el flujo de venezolanos, peruanos y ecuatorianos.
En este momento no contamos con ninguna ayuda internacional para el sostenimiento de dicho albergue. Sin embargo, quiero resaltar la cooperación de la gente de la parroquia, que, a pesar de ser de escasos recursos económicos, aporta para cubrir las necesidades básicas de las personas en tránsito. Esto lo hemos logrado especialmente con las comunidades aledañas a ruta CA 13, que nos conecta con el Petén y con las fronteras mexicanas que por esa región están. Consideramos este paso de unos cuarenta kilómetros como un puente solidario, en el cual, la gente brinda los apoyos antes mencionados. La nueva narrativa de solidaridad y empatía que hemos ido difundiendo, nos ha ayudo a ir contrarrestando la xenofobia que aún existe y que genera indiferencia. ¿Te gustaría colaborar con esta causa?