Por el Estudiante Gerardo Bolaños, cmf.
Es nuestro último día de Asamblea. Hemos retomado el horario que hemos mantenido toda la semana. Iniciamos nuestro día con la oración preparada por la delegación que vino de Panamá.
Después de desayunar, nos reunimos todos en la sala para ayudar a las laicas y laicos que asisten a esta Asamblea para explicar el método que nos propone el XXVI Capítulo General y el modo que hemos ido trabajando; también sirvió la ocasión para recordar a grosso modo todo lo que vimos el día anterior. Por lo tanto, toda la mañana fue para reunirnos en grupos y luego exponer los resultados de los ecos que surgieron en los grupos.
La tarde de éste día fue empleada para llevar a cabo un plenario y síntesis dela Asamblea e incluso se abrió el espacio para todos los asuntos varios o cosas que faltaron por aclarar.
Luego, a las 6:00 p.m. pasamos a la capilla para dar inicio a la Santa Eucaristía, dando gracias al Señor por esta Asamblea Provincial 2022, que fue para todos nosotros un motivo para estar mucho más arraigados, audaces, alegres y acompañados por la gracia del Espíritu, así como nuestro Fundador San Antonio María Claret. Esta celebración fue presidida por el P. Javier Hernández, cmf; Prefecto de Apostolado, junto con los otros miembros del Gobierno Provincial. El P. Hernández resaltó que el Evangelio que hemos leído en esta noche ha caído como anillo al dedo para culminar esta Asamblea: “no es la culminación de la Asamblea, sino el envío que nos da el mismo Jesús. Por lo tanto, somos enviados en medio de lobos, ante un mundo que cree que todo está mal”.
Después pasamos a disfrutar de la rica cena preparada y un breve compartir fraterno.